La insistencia de querer instalar a Stratta y a Giano como candidatos genera una fuerte preocupación en el PJ.
Charlan con discreción distintos intendentes, legisladores y referentes territoriales del PJ porque están sumamente preocupados por el futuro del peronismo provincial. Por las chances que pueden tener de conservar el poder ya que “Gustavo tiene cerrado el partido”, chillan.
Pero no es sólo por eso el malestar. Aparentemente se van sumando distintos factores o circunstancias que hacen que sean cada vez más los que cuestionan directamente la capacidad de conducción y de liderazgo del Gobernador. No lo transparentan por ahora más que en grupos selectos de extrema confianza y en contados intercambios entre ellos mismos. Va acumulando, según dicen, méritos suficientes para que la única duda sea “si es o se hace”, según nos contó una de las personas que participó de al menos dos “conversaciones”, lo que pudimos chequear con otra fuente, siempre pidiendo reserva.
Enumeran: El endeudamiento en dólares a la provincia y que hizo que varios municipios lo sigan, la ley de emergencia que les valió fuga de votos de sindicalistas y trabajadores; el fallido paso en falso que dio con el Kichnerismo; no le perdonan que lo haya llevado a Kueider como candidato a Senador Nacional, que es una figura completamente ajena al PJ; “las quiere todas para él y sus amigos, sin lógica”. (También le reprochan a Carbonell y a Schumacher, en el STJER).
A esos hechos se le suma otro que los tiene más que preocupados, alarmados y que según expresaron, los hace “perder la capacidad de asombro” a varios y varias: Que Gustavo Bordet intente o pretenda imponerles una candidata a Gobernadora que ni siquiera pudo ganar nunca en su ciudad natal, Victoria, como es Laura Strrata, ni recurriendo a “subsidios” que habrían sido entregados a personas fallecidas; “y el colmo es que sea Angel Giano de Concordia el elegido como Vice, que no pudo nunca acceder ni a una interna de precandidato a intendente “porque siempre se bajó antes”. Particularmente los militantes de Concordia, lo tienen calado como un pícaro, que siempre “negoció bien sin tener votos, un capo, dicen”. ‘Son “cinco o seis” los de su «agrupación” y están todos acomodados’, nos confían en off dirigentes de la capital del citrus.
También agregan a esos argumentos que en Buenos Aires las autoridades nacionales le tienen el “boleto picado” a Gustavo y que sería considerado ya prácticamente un “ex Gobernador” o un “Gobernador mandato cumplido”. Razón no les falta.
Tienen miedo enumrando todas éstas razones, porque viene brava la mano con el FMI, y no está para errar demasiado en la faz política, como lo está haciendo Gustavo “porque nos puede llevar puestos a todos”, dicen. Qué necesidad tenía de irse a Punta del Este, se preguntan y otros le reprochan ese aumento desmesurado del 87 por ciento, por falta de cintura política: “La gente se caga de hambre, que le costaba evitar eso”.
No sabemos lógicamente como irá a decantar ésta movida incipiente, pero de todas formas pese a que cuando sutilmente sondea a sus interlocutores, hasta ahora optan por “seguirle la corriente” y “correrlo para el lado que dispara”, el clima está realmente “caldeado” en el Frente de Todos. Y no solamente por el calor del verano. Esa pregunta si es o se hace, resume que lo que no dudan es que el camino que elige el conductor, es el equivocado.
Ricardo David