La mano amiga y el ” maso” de lana, no castigo diríamos al juez local acusado y apenas “condenado” por delitos de violencia y acoso al género opuesto, ha reprimido modestamente aplicándole una sanción de un mes sin goce de haberes, mientras a su “presa” víctima casual, la apartan a otro despachó, anulan por decirlo de alguna manera su carrera laboral y todo queda en casa.
Obvio estamos hablando de alguien “hijo del poder” que llego seguramente a ocupar ese espacio en la justicia por ser hijo de un conocido miembro del Superior, hoy fallecido y una madre también con cargos en la ciudad de Paraná, también en la ” justicia”.
Algunos medios locales se hicieron eco de la noticia publicada en un medio capitalino y la levantaron con una fotografía muy sonriente del propio juez y otros apenas con disimulo y sin querer hacerlo, en forma muy discreta, restando importancia a los hechos, lo dieron a conocer.
Felizmente concejalas del PJ tomaron las evidencias y se expresaron con todo rigor sobre el dictamen recientemente conocido respecto al juez en cuestión.
De todos modos a SS no, no desplazaron de su confort del despachó y por ende seguirá en el mismo mientras “dure su buena conducta”.
Ahora bien si este acto es solo una indisciplina que se “castiga” con un mes sin goce de haberes, que se espera que un magistrado o este mismo cometa, para una sanción ejemplifica dora.
Toda una vergüenza.
