Argentina, Marzo de 2022 – COMUNICADO
La Confederación General Almacenera de la República Argentina, ante la inmensa preocupación
Preocupación que embargan a sus más de 150 mil representados, comercios de proximidad
Compuestos por familias almaceneras y autoservicitos a lo largo de toda la geografía
Nacional, exponen las dificultades que atañen al sector.
Inflación: El constante aumento de precios en las mercaderías (alimentos) que
Comercializamos, pone en serio riesgo de colapso a nuestro segmento comercial por la
Descapitalización de stock que produce y la constante baja de ventas provocada por la
Reducción del poder adquisitivo de los consumidores en su conjunto.
Desabastecimiento: Tanto las empresas proveedoras directas como las que nos
Proveen a través del sector mayorista o distribuidores, por diferentes argumentos
Manifestados, no entregan distintos tipos de mercaderías provocando
Desabastecimiento de estos productos; podemos entre ellos citar los aceites y
Derivados desde ya hace bastante tiempo; ahora se sumas las harinas y productos
Elaborados con esta materia prima.
Programas de Comercialización: La Secretaría de Comercio Nacional en forma
Permanente trabaja en la elaboración de distintos programas de comercialización
tendientes a frenar la escalada de precios sobre todo en alimentos, pero más allá del
Éxito o fracaso de estos programas, nuestro sector siempre queda afuera por no poder
Conseguir precios de costos adecuados para trasladarlos al consumidor. Nunca desde
el gobierno, se elaboró una lista de precios mayoristas para proveernos y poder
participar de los precios controlados, que más allá de nuestra predisposición para
Aplicarlos, es de público conocimiento que los sectores económicamente mas
Vulnerables de la comunidad compran en nuestros comercios con los magros ingresos
Que pueden conseguir en el día. Las grandes superficies con las que negocia el
Gobierno, no están donde la gente más necesita, ya que antes de radicarse hacen un
estudio del nivel adquisitivo de sus potenciales clientes.
Promociones: A menudo las pocas empresas que nos proveen en forma directa, a
quienes entendemos que les autorizan las listas de precios en la Secretaría de
Comercio Nacional, aparecen con prácticas de comercialización que podríamos calificar
De desleales, y esto no es controlado ni sancionado por las autoridades, por ejemplo en
Sus listan sostienen una bonificación por combos de sus productos, pero al no entregar
Todos los que integran ese combo, la reducción del precio desaparece dejando fuera de
Competencia al sector que abastecen.