Con la decidida decisión de Oscar Noir, de integrarse al equipo de trabajo del intendente de la ciudad, Martin Oliva, automáticamente paso hacer uno más del oficialismo, sin poder de diferenciarse, por más que el insista la gente me conoce y queda atrás las voces de la gilada cuando decían pertenece al Laurittismo, al Scelzismo o al Olivismo, lo real y concreto que es parte del gabinete oficialista.
Aunque a muchos le parezca una coyuntura, el Ingeniero, Contador Público y futuro Abogado, Rubén Delsart, queda instalado como el único peronista sin referencias y sin tener que rendir cuenta a nadie, solo a la sociedad, los otros del PJ oficialista es la continuación de los últimos 40 años.
Hoy Delsart posee una libertad única, poder hablar con la oposición, con el oficialismo, con los independientes o con cualquier organización que tenga ideas para la ciudad, días atrás se lo escucho hablar con mucha solvencia en la Audiencia Publica, de Paso Vera al Norte, cuando tres porteños traían un enlatado para nuestra ciudad, lógicamente previamente nos contaban de como el proyecto, recibía loas en Puerto Rico, Colombia y varios países más, mientras el Intendente Martin Oliva salía corriendo ante la primer pregunta, acompañado de su fiel jefe de gobierno, la Directora de turismo, un ente, se sometía a silencio y la directora de la Isla del Puerto Leticia Haudemand que iba a ser la organizadora de la idea, todo una verdadera farsa, para los medios amigos.
Lo primero que está construyendo Rubén Delsart con bases sólidas, donde la prioridad sea definir de una vez que clase de ciudad queremos, dejando de lado, al conservadorismo de los últimos 40 años, donde todos los caminos llegaban a tres dirigentes que según la cara le levantaban o bajaban el pulgar, es la primera vez en los últimos 40 años, que la perspectiva electoral muestra a alguien independiente de este laberinto, era muy común escuchar según sea tu orientación política tienes que hablar con sultana, mengano o fulano, ellos te bendecirían o no.
Cierto es que según mi criterio, las charlas con posibles candidatos opositores, oficialistas, gente del Centro de almaceneros, del Cecom, empresarios independientes, ex funcionarios, audiencias Públicas, la perspicaz forma que lo empiezan a rodear el oficialismo son elocuentes, lógicamente se desprenden las conclusiones, es aquí donde Rubén Delsart debe conservar la calma, cuando el poder empieza a vislumbrar pérdida de poder o del poder mismo, otros cables para sustentarse aparecen, él es uno.
Juan Carlos Botta – El Disparador Uruguay
