Hace un par de días con la vehemencia que siempre lo caracterizó, escuchábamos al Chivo Mario Angelini, afirmar que Carlos María Scelzi llegó a la intendencia gracias a la militancia y reconocimiento que el pueblo peronista de Uruguay reconocía en Carlos Granillo Posse.
Desde su humilde escritorio y casa familiar sita en calle Perú, “Carlitos” armaba la estructura para una mejor campaña, con hombres y mujeres comprometidas con su barrio y con la gente.
Junto a él caminaba Patricio González, repartidor de soda y hielo de fábrica Lucera.
Llego a diputado provincial, de igual manera Rosita Alul de Eguillor, reconocida como Senadora Provincial y su trabajo docente.
En el Puerto Viejo se encolunmnaba Anita Perú Jo; por plaza San Martin Pituca Lena de Flores, Isabel Quintana, María Siegrist, María Britsch, Lidia, Quela e Inés Tosonotti, Chapelet y Sra., Aníbal Lujan Ramírez, y la fuerza del movimiento obrero.
Y muchos más que la memoria me traiciona.
No era menos importante en la sumatoria peronista hablar del polo de Piturro Escalante y toda la familia Minatta.y lógicamente el grupo aguerrido de Tofalito.
Ese garaje que se respiraba solo un peronismo recalcitrante.
Ni que hablar del Fortín Peronista del Gaucho Rodríguez de calle Suipacha .
Roberto Giles, Cesar Cruz, Japón Yositake, Gaspar Morabe, Simeon Caballero, Juan Grattarola, Luis Riera
Y así con la fuerza y el ímpetu de todo un pueblo peronista, proscripto muchos años y sufrido con cárceles y fusilamiento en nuestra ciudad Carlos Scelzi llegaba a la intendencia.
Quedo en el tintero y vale recordar a Caroto Casaretto y el Turco Athan ambos gremialistas.
Desde la LT11 se levantaba la vos de Juan Zoilo Llovet del gremio “locutores ” y quien oportunamente fuera su director J. B. Etcheverry.
Breve reseña para ponerle acento a las palabras del Chivo Angelini.
La Hiena Piloni