Tenemos una calle que nace justamente en el “su único heredero” el Colegio Nacional.
Tenemos una plaza o muy cerca del micro centro circundada por calle Rizzo, 9 de Julio, Álvarez y San Martin; hoy puesta en valor por esta gestión como la primer “plaza blanda” en donde en su centro muestra un busto de Justo José, de escasas dimensiones.
Tenemos un monumento en el ingreso, obra del artista Guinea, hoy fallecido emplazado en una rotonda que hace de derivador de las calles de entrada y salida a la ciudad, por calles Juan Sanso ni y Juan José Bruno.
Tenemos un Colegio Nacional con su nombre.
Tenemos su casa familiar con casi cien años en manos del Correo y Telecomunicaciones.
Pero nos falta el gran monumento en honor y gloria al primer presidente constitucional de nuestro país
Un monumento al estilo del de San Martin en Mendoza, o al de Martin de Güemes en Salta o el mismo del Urquiza emplazado en el parque que lleva su nombre en Paraná.
Hoy inauguramos una muestra del Gral. En donde se exhibirá indiferentemente su rostro, realizada por el artista Ramiro Ghigliazza.
En definitiva le debemos y nos debemos los uruguayense el gran monumento que debería estar a nuestra consideración entre el actual Correo y su heredero el Colegio Nacional.
El Observador – Eldisparadoruruguay.com.ar.