El Precandidato a Intendente de Concepción del Uruguay por Partido Obrero en el Frente de Izquierda
y de los Trabajadores – Unidad (FIT – U), Pablo Amarillo dijo que “para la familia trabajadora es inaccesible comprarse un terreno”. Recordó que “el déficit habitacional en nuestro país es de 3 millones de hogares que no tienen la casa que necesitan y nuestra ciudad no es una excepción”.
“En Concepción del Uruguay los únicos que acceden al suelo son un pequeños grupo de constructoras y desarrolladoras inmobiliarias que construyen departamentos y locales como reserva de valor”. Amarillo
Apuntó a que “mientras muchísimos de esos departamentos están vacíos, un joven no puede irse de la casa de sus padres porque los alquileres están por las nubes”.
“Por eso hacemos un planteo integral”, remarcó el precandidato a intendente por el FIT-U y adelantó que llegados a la intendencia “cobrarán un impuesto a las viviendas y departamentos ociosos lo que generará una mayor oferta de propiedades en alquiler y a su vez, con la recaudación de ese impuesto, financiaremos obras para que terrenos fiscales y baldíos cuenten con servicios y sean habitables. Estos terrenos serán loteados para que la familia trabajadora de nuestra ciudad pueda comprárselos al municipio pagando una cuota que no supere el 10 % de sus ingresos”. “Como decimos siempre, la tierra es para vivienda no para la especulación inmobiliaria”.
“Cristina y Massa reivindican una política petrolera de saqueo en favor de Chevron y Techint”
El precandidato a presidente del Partido Obrero en el Frente de Izquierda-Unidad, Gabriel
Solano se refirió al acto de campaña en el que se mostraron juntos el presidente Alberto Fernández, la vicepresidenta Cristina Kirchner y el candidato de Unión por la Patria y ministro de Economía Sergio Massa, en la inauguración del gasoducto Presidente Néstor Kirchner.
Gabriel Solano sobre el acto realizado en Salliqueló afirmó: “Cristina, Massa y Alberto Fernández hicieron un acto de unidad del peronismo bajo la batuta de Chevron y Techint. La inauguración del gasoducto, lejos de ser un pilar de independencia nacional como sostienen, es parte de la política de entrega a las multinacionales y la patria contratista que se encargaron de reivindicar las tres alas del frente oficialista.
Con una de las mayores reservas de no convencional del mundo, argentina seguirá siendo importador de energía por un largo período, incluso con el gasoducto. Los responsables de esta situación son todos los que nos gobernaron las últimas décadas: el menemismo que entregó YPF a Repsol, el kirchnerismo que montó un esquema fraudulento de saqueo con Esquenazi y luego reestatizó la compañía pagando indemnizaciones multimillonarias en los tribunales internacionales, y por supuesto, el macrismo. Ahora, con Massa, los recursos que el país ahorre en materia de importación de energía, irán al pago de la deuda y la fuga de capitales”.
A su vez, el precandidato presidencial de la lista del Partido Obrero- MST en el FITU, sostuvo: “El acto de ayer fue además un acto de reivindicación política de Massa, al que Grabois asistió sin chistar. Pero lejos de la supuesta épica, con Massa se agravó la pobreza y la polarización social. Mientras se construyó el gasoducto a velocidad récord, las comunidades de Neuquén que están sobre Vaca Muerta, siguen sin gas.
El impuesto a las grandes fortunas terminó en manos de la patria contratista a través del gasoducto. Los pactos con el FMI están provocando mayores tarifazos y golpes a los salarios. Hoy se juntaron las tres expresiones de este gobierno de fracaso y ajuste contra la clase trabajadora. Llamamos al pueblo a romper con esta política y a reforzar a la izquierda, la única fuerza que plantea la nacionalización integral de la producción de energía, para colocarla como un factor fundamental de un desarrollo nacional para beneficio de las mayorías populares”.
Partido Obrero