Tiene que arribar a nuestra ciudad el Gobernador para que nos enteremos de algunas obras que están en mitad de camino, o licitadas que fueron comprometidas y vienen reconducidas de la gestión de Oliva. Los responsables de obras públicas brillan por su ausencia. Se habla de un triunvirato.
En la presentación del gabinete a Rogelio Frigerio no se le vio la testa. Que misterio.
En otro orden no se sabe en qué condiciones se realizó la transición. Tómala vos dámela a mí….
Cacho Colombo se la entregó a Cacho Colombo y parece todo estaba bien. Otras autoridades de la Secretaria de Hacienda obviamente, estarán prohibidas de omitir opinión.
Prensa Municipal si existe no nos enteramos, al menos a nosotros no nos llegan los comunicados ni las invitaciones. Todo es muy oscuro. O están esperando se venzan contratos en la Caru como si no existieran otros.
Todavía no conocemos la perdona autorizada en el área de secretaria privada. Se habló o se rumoreó en los mentideros que se estaría por implementar atención en horario vespertino, pero hasta la fecha nadie sabe nada.
Hoy a diferencia de otros municipios lo más importante es la fiesta de la playa y no las paritarias para los obreros y empleados municipales, que obvio aún Lauritto no dio a conocer la planta de personal, su cantidad y su organigrama.
Los ñoquis siguen caminando por los pasillos buscando oficinas y despachos donde conchabarse mientras otros ni aparecen. La pregunta del millón ¿quién es el jefe responsable encargado de RRHH? Quien asume como contralor del personal.
En resumen todo intento demostrar un cambio con las nuevas autoridades pero parece que todo es igual. Demos los tres meses de gracia para ver caminar a la gestión y luego volveremos.
No podemos olvidar la gente del Mono que volvió y eso que juraban lo odiaban, son Gardel los muchachos y muchachas.
Juan Carlos Botta – El Observador – Eldisparadoruruguay.com.ar.
