Es fácil decirlo, es difícil aceptarlo, es imposible ponerse en su lugar, después de haber luchado tanto, pero se vienen momentos duros para Juan explicarlo, imaginarlo, si serán o no causas civiles, o penales u otras lo importante es si es amigo hay que pensar en alternativas a futuro, que comprenda por un hecho de la naturaleza se pueden llegar a tener cuestiones inimaginables.
Para que recibir presiones políticas, presiones de familias, presiones de amigos, no sé si es justo o no ni tengo idea de quien será responsabilidad pero lo que sí sé que iba en un coche oficial, y tuvo la desgracia de que cuatro personas murieran.
Tomar distancia de los hechos Juan ya se encuentra en una clínica de Capital Federal, no se fue por un daño irreparable se fue en busca de tranquilidad de conciencia y ver si al final puede pensar con tranquilidad las cosas que vendrán, si conviene seguir en el cargo o liberarle un lugar emblemático a Rogelio Frigerio, por que vendrán una catarata de inconvenientes, lo primero debe cuidar es su salud mental, por el mismo, por su familia, pensando en otras personas que seguro tendrán momentos difíciles, no tratando de poner en su lugar.
Sería más fácil no interpretar mirar para el otro lado sin decir lo que se piensa, pero hay familias que perdieron todo, eso si que debe resultar más difícil pensar cómo se organizaran de aquí en más con tanto dolor, me decían algunos amigos de Juan que también estaban pensando o imaginando como atravesara este camino de tantas espinas.
Pero hay otra cuestión hay familias que no imaginaran más el futuro o el porvenir solo que han sido marcada por el destino.
Juan Carlos Botta – eldisparadoruruguay.com.ar
