Sorpresivamente y no por que le falte edad, sino porque ya estábamos acostumbrados Nacho Cabrera, dio un paso al costado como ” conductor” del Pato Concepcionero para dedicarse a su familia. Fueron muchos años que acompaño a José Eduardo a cuantos eventos la función pública así lo exigía. Una vez que su vocación como policía daba por terminada para acogerse a la jubilación, opto por enbuiscuirse en la política. Sus primeros pasos los camino junto a Hugo Cettour, no como su chófer, sino como un militante más, hasta que se sumó al lauritismo y desde entonces con experiencia como policía, conocedor de nuestra ciudad y todos sus ” rincones”, paso a ser un hombre de confianza de José, su conductor y amigo; ya que asimismo los unía su pasión futbolera por Gimnasia y Esgrima local.
Así fue que Nacho estuvo desde la primera gestión de Lauritto como intendente, hasta nuestros días.
La pregunta sería: quien conducirá a José???
No es tarea fácil y requiere de estar a toda hora y durante todos los días a disposición. No importa cuál sería el valor de la contraprestación de servicio, sino de ser alguien de extrema confianza, que no ve, no escucha y no sabe.
Las exigencias de conducir al líder, son extremas y hay que abandonar muchas cosas y se pretende ser el hombre que lo lleva y lo trae, más allá de los hábitos de manejo. Con el tiempo los hábitos y costumbres del Dr.se logran conocer y aprender, pero se necesita abandonar otras preferencias.
Sabrá la persona interesada que las ” esperas” agotadoras, Lauritto no tiene auto propio, mucho no le agrada moverse en autos oficiales, llevar siempre un peine en la guantera, equipo de mate y la documentación vehicular y propia en regla.
Todo lo demás en cuanto a mayores detalles, estará Nacho para ser el gran maestro.
No es fácil.
Juan Carlos Botta – eldisparadoruruguay.com.ar