El Cabezón llego al cielo fue a presentarse con Dios y le dijo Hijo mío no estás en la Lista, obediente fue y Golpeo la Puerta del Diablo y este con gran sorpresa le manifestó no has purgado tus penas

Por suerte pareciera que las horas contadas de ayer fue solo un aviso, no significa que el cáncer desapareció  y los problemas, resumen otro gran trabajo del  hospital público, encuentra metodologías y curas optativas, no definitiva pero aseguran que al ser un hombre joven, podrá tener una vida con inconvenientes  pero  en plenitud.

Seguro que algunos les molestara las metáforas de utilizar del mismo modo a Dios que al Diablo pero son códigos de una realidad muy presente, donde sabemos perfectamente que milagros no puede aspirar, pero si a prolongar su vida con dignidad, tener su catéter, tener su quimio o lo que es aún más importe que sienta ganas de vivir y de generarse proyectos.

Fundamentalmente su amigo de la infancia está decidido como nunca a  ir por la gobernación de la provincia de Entre Ríos, no sé si llegara o se quedara en el camino, pero el interiormente sabe que acompañarlo en este intento  es un desafío muy especial.

Muchas veces se pone en la balanza cuanto puse yo y cuanto vos, por lo general se está en deuda, pero eso es una mirada diferente, tiene varios objetivos a corto plazo conocer a su próximo nieto o nieta, jugar,  arrancarle unas risas y otras cosas y sobre todo que la vida te siga sorprendiendo.

Cesar Adalberto Cabezón Delsart es un mortal más y está entre nosotros y pobre ser el arfil de su amigo.

Juan Carlos Botta – eldisparadoruruguay.com.ar

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