Una determinación puramente personal, para tantos y tantas que desde la militancia, son elegidos para ocupar cargos ejecutivos, que los convierten en “funcionarios” y en muchos casos la misma función hace que dejen de ser políticos.
La función ejecutiva de pronto te absorbe el tiempo, y te olvidas de caminar como suele decirse; del territorio para estar la mayoría del tiempo “atrás de un escritorio”.
Sin dudas, el trabajo y en la necesidad de resolverlos problemas que implica ser funcionario ejecutivo hacen que te alejes sin pretenderlo, del trabajo político.
Muchas veces sucede que ser eficiente y resolutivo en estas tareas, hagan que líderes políticos te van designando en esas tareas, por que le soy funcional a su gestión.Y es aquí donde perdes la mira y te transformas en el mejor hombre de un estado ejevutivo, distante a tu propia necesidad de ser político con independencia.
El algún momento cada militante debe dejar de ser el elegido o el funcionario que acompañe, para ser uno mismo y someterse por motus propio a la consideración del pueblo.
Si esto no se entiende, siempre pasaras a ser el funcionario que acompaña a quienes arriesgan, se postulan más allá de ganar o perder.
Se hace necesario llegada tu necesidad y ambicion de brillar con luz propia y es ahí donde en la cancha de podrán valorar más o menos, proporcionalmente directo a la aceptación que generas en las bases votantes.
El olvidarse de estas alternativas hacen que pudiendo ser un líder te conviertas en un hombre militante ejecutivo ” sin usina” y llegaras hasta donde puedas dependiendo de otros.Si en esta condición deberás entender por sobre todas las cosas que cuando dejes de interesarle al político de turno o a ” tu politico”, te espera el destierro con un paquete de sal en la mano.Idem y más allá de ser alguien ” rebelde” que intente contradecir o no coincidir con la propuesta que te encomiendan.
Por eso sepan la generaciones jóvenes con ansias políticas, que en función de la militancia , se debe ocupar espacios propios, con esa independencia que te da el voto popular,
depender de uno mismo y llegado el momento arrepentirse de lo que uno se impone y no de lo que te puedan imponer otros.
Siempre lograr experiencia en la función es muy importante, pero llegado el momento el camino se abre en dos trazos y es ahí donde cada uno debe saber elegir en virtud de sus aspiraciones.
También suele, no siempre y como expresa la popular, ” unos nacen con estrellas y otros nacen estrellados”, que te toque la varita mágica o ” el dedo” y de arranque de la nada, con poca inserción social, con cero militancia, solo ser amigo del caudillo, y te integran en la lista en aquellos lugares que perdiendo sos ganador.
De todos modos, el que quiere pescado que se moje, se pinte la cara, se calce las alpargatas y salga al ruedo.
No obstante crecer politicamente desde la función ejecutiva es válida y tanto importante para lograr coronar tus deseos; pero el esfuerzo y el compromiso será doble y sin descanso.
Y…como dijera Peron, “cada uno artífice de su propio destino”.
Martin Pescador – eldisparadoruruguay.com.ar