Si de trayectoria política se trata, el actual intendente tiene para todos los gustos, salvo la gobernación.
Seguramente después de estar en los mejores lugares que puede aspirar un político, su sueño parecería que es llegar a la casa gris.
Hoy el camino tiene menos espinas que en otros tiempos, cuando Concordia, capital del peronismo y de la pobreza, no daba espacio ni lugar a nadie. Se sucedían los cargos, los mejores lugares unos a otros, como el ADN para los mejores negocios en defensa propia.
Después de aquella fórmula Cresto/ Blanc con el que comenzó la ciudad del citrus, con aquel recordado ” carnicero” Dardo Pablo Blanc; empezaron surgir los concordienses de manera ininterrumpida.
Con las heridas abiertas y aún en sangre viva, muchos y muchas dirigentes jóvenes están pretendiendo reconstruir lo que la codicia de algunos hizo añicas.
Desde Uruguay nace una luz en el fondo del túnel, que se puede coronar siempre y cuando se sume sin discriminación y sin tirar voluntades por la ventana, más allá de la franja etaria.
Así se viene escribiendo la historia de una Ciudad de Concordia que con hombres de sus tierras en los mejores espacios de gobierno, llevaron a su pueblo al máximo en miseria y pobreza.
Este panorama llevó a que Frigerio rompa la tradición y derrote en las urnas a un peronismo que se olvidó de las bases, pero no de sus ” bolsillos”.
Salvo Mario Moine la provincia estuvo en manos de Jorge Busti, Sergio Urribarri, ambos por dos períodos, Gustavo Bordet otros dos gestiones, con Orduna de vice también de Concordia, Dany Rossi de Santa Elena, José Lauritto de Uruguay, Laura Stratta de Victoria.
Lo notable que a dedo manejaron al mejor estilo del ” capanga” de pueblo los lugares en las listas de diputados, senadores provinciales y nacionales. Sin escrúpulos algunas conyugues en los primeros lugares de diputados como la actual señora de Bordet o el mismo Busti que único su señora en la diputación. nacional o en su defecto a los socios en espurios negocios como Edgardo Kueider, con Bordet que hoy caído en desgracia pretende tomar distancia.
Nuestro hombre es Lauritto y sin dudas hay que construir desde las cenizas un proyecto que nos lleve al triunfo
Hay que ” tocar el timbre” a propios y extraños, y aspirar a una franja ancha sumando a todas las localidades hoy manejadas por el peronismo. Aquella creación del propio Jorge Busti, conformando la liga de intendentes peronistas, con un Sergio Montiel, ( UCR) de gobernador dio sus frutos. La primera reunión que dio sus bases se hizo en Basabilbaso con quien fuera su intendente Cr.Fedonzuk.
Y VOLVIMOS.
Si supimos reconstruir aquella derrota de 1983 hoy podemos repetir la historia.
Por lo visto hay y existen intenciones de llegar. Se va necesitar poner huevos en muchas canastas sin perder la identidad y sumar algunos extra partidarios como se supo conformar con a que frente justicialista
El Observador – – eldisparadoruruguay.com.ar
