Por entonces el PJ que no tenía sede propia funcionaba en la esquina de San Martin y Tibiletti. (Hoy kiosco Dalmata). Su presidente era Carlos Briozzo y su vice Mario “Chivo” Angelini.
Recién en la gestión de Hugo Baldoni se compra la sede actual a la sucesión de la familia Parinotto.
La cuestión era que cerrado el escrutinio y en el recuento de votos, la UCR se imponía y ganando solamente el DEM, con Juan Carlos Godoy a la Presidencia y M. Seguí a la vice. Este último a sus efectos fue designado con alcalde de la unidad penal N4 de nuestra ciudad.
El recuento daba que el HCD con Tito Parma como primer concejal superaba a la UCR por apenas 21 votos.
Sucedía que existieron muchos cortes de boletas respectó a las autoridades al Concejo Deliberante propuesta por la UCR.
En virtud de dichos cortes y sumados los votos de la ciudad de Talita, el peronismo ganaba por ese muy pequeño margen el HCD.
Se dice y aún existen testigos de aquel recuento que duró desde el cierre hasta más de las tres horas del día siguiente.
El radicalismo se negaba a aceptar haber perdido uno de los poderes municipales.
Por ende se comentaba que se “movieron” influencias de todo tipo para no incluir los votos de Talita en el escrutinio local, pero la junta electoral hizo caso omiso y confirmó el resultado de las urnas.
En todos los ámbitos políticos el comentario generalizado era que el Compañero Juan Carlos Godoy no iba a poder gobernar con esa composición de los poderes.
Pero no fue así.
Quedo demostrado que se pudo y sin grietas.
Fueron cuatro años ejemplares de convivencia democrática.
En cada oportunidad que Godoy necesito tomar licencia cual quiere fuere el motivo, Tito Parma lo reemplazo sin ningún tipo de inconvenientes y no existió nada que desestabilizara la gestión.
Fueron actos de extrema confianza y excelente desempeño de ambas partes.
El Memorioso