200 AÑOS DE MASONERÍA EN CONCEPCIÓN DEL URUGUAY SE CUMPLIERON ESTE AÑO…

Mucho se ha escrito de la masonería, inclusive el suscrito a redactado y publicado varias notas en distintos medios de la provincia, entre ellos el Diario La Calle cuando era solo edición papel, y actualmente en el medio digital del Disparador Uruguay, espacio que con gentileza me otorga el amigo Botta.

Por Alberto Ricci

Esta vez no redactaré un texto de manual histórico, seré breve, dado que mucho se ha escrito de esa forma por varios autores al respecto del tema en cuestión. Sino que daré a conocer algunos condimentos de entretelones, producto de la observación e investigación que va más allá de la mirada de los historiadores clásicos y revisionistas actuales. Parafraseando al maestro Perón, diría: “Una tercera posición”.

La masonería local nace con el levantamiento de Columnas de la Respetable Logia y posteriormente capitular “Jorge Washington” con Carta Constitutiva N16 de La Gran Logia del país hermano del Uruguay, por visión e impronta de los Coroneles Mansilla y Perea, quienes en el año 1822 “sentían admiración” por el libertador independista, maestro masón y primer presidente de los Estados Unidos del Norte, George Washington. Desde ese año 1822 y con el argentinismo “Jorge” Washington, título que la representa desde sus comienzos se da vida a la Logia local.

Por esa “admiración” al presidente del país del norte, nace la denominación de la Logia local que por ser contemporánea al derrotero del libertador José de San Martín, no se lo tuvo en cuenta para que lleve su nombre. Después del exilio de José de San Martín, corría el año 1824, vinieron tremendas luchas internas en el país que hicieron que la Logia opere “clandestinamente” en nuestra zona entrerriana.

En años posteriores de caminar su taller el Poderoso masón Justo José de Urquiza (El Gran iniciado local), también vinieron sucesivos “batir de columnas” (inactividad) de la logia. Que por esos años funcionaba en casas particulares de los hermanos masones dado que todavía no tenían una edificación del Templo en un lugar fijo, cómo actualmente es a la altura de calle 8 de junio al 720. Es así que llegó a funcionar en la casa familiar de Juan Chiloteguy, iniciado masón. Familia tradicional de la época. Y que por su descendiente el escribano Julián “Martuncho” Chiloteguy, me entero de que existían los masones locales. Su confianza en describirme el accionar de la masonería uruguayense se debió a que su esposa Juanita Marcó de Chiloteguy fue madrina de mi casamiento en el altar. Por eso también me entero que el último Venerable maestro local antes de volver a batir columnas, fue Carlos Marcó, de otra prestigiosa familia local.

La logia local tuvo idas y venidas (Hasta un cuadro pintado con la imagen de Washington fue tajeado). El caminar de mi investigación me llevó un día a encontrarme en un prestigioso Estudio Jurídico, con la escritura número 23 del año 1936 donde describe que los masones locales adquieren otra lonja más de terreno de 2ms de frente x 17,77mts de fondo para agrandar la propiedad del Templo.

En ese mismo Estudio Jurídico, posteriormente un joven de ideología peronista se encuentra con el Pro-Gran maestro de la Gran Logia de Libres y Aceptados masones, Licenciado Jorge Wesolowski. Socialista. Tal vez por eso se entendieron. Tal es así que el joven peronista (sólo se da nombres de masones fallecidos), decidió con tesón y con el mandato del pro-Gran Maestre, convocar en primer instancia a dos amigos abogados, uno de ellos actualmente Legislador suplente y asesor nacional. El otro amigo también ideológicamente peronista, hombre de leyes sumergido en sentencias. Para que la Logia Jorge Washington recobre vida con el levantamiento de columnas y vuelva proponer o forjar obras similares a las que fundaron años anteriores los pro-hombres masones de la ciudad: La Sociedad italiana de Socorros Mutuos La Benevolenza; La Fraternidad; y otras importantes obras que todavía siguen vivas.  

El joven peronista que menciono en el párrafo anterior, su visión y accionar fue la “piedra angular” y con el acompañamiento de sus dos amigos formaron el necesario triángulo delta masónico, permitiendo que la Logia local Jorge Washington (Hoy día con Carta Constitutiva N 44 de la Gran Logia Argentina de Libres y Aceptados masones) vuelva a “Levantar Columnas” y tener pujante actividad.

Cómo describo, dentro de los talleres masónicos conviven hombres con distintas ideologías políticas y creencias religiosas. En el atril se verá la biblia, el torá o el Corán. Que demuestra la libertad de pensamientos en comunión. Queda claro que los hombres con ideología peronista, en toda Institución sean o no iniciáticas, son hombres de hacer.

Alberto Ricci para el Disparador Uruguay. Nov2022.

Juan Carlos Botta – El Disparador Uruguay .com .ar

COMPARTI ESTA NOTA
Facebook
Twitter
WhatsApp

Escuchanos en Vivo ya!