No es una simple afirmación, es la realidad del trabajo militante y de la exposición que ha tenido Juanito en este último año, no solamente carteles, recorriendo barrios, escuchando a la gente, dialogando con diferentes referentes políticos, tratando de construir una base peronista, buscando los cuatro mil votos que le faltan.
No se muestra en las fotos, en las instituciones como demostrando que recorrieron y ni siquiera conocen a los que cumplen alguna función, Juan se muestra tal cual es, cierto por ejemplo anoche no se lo vio en la procesión, si se vio a otro, pero debe buscar el voto que no tiene consolidado.
Es difícil hacer campaña contra nadie, solo contra el rumor o la posibilidad de que sea tal o cual, es cierto mientras en Capital, dobla en todas las encuesta, en la provincia Frigerio Pareciera que puede ganar, en Uruguay es difícil, tendrá que buscar los candidatos sea vice o concejales con una mirada hacia la gente con otros perfiles, que garanticen un respaldo muy fuerte a la formula.
No es fácil quebrar 40 años de gobiernos peronistas, más aun cuando propios que le juraban lealtad empezaron a emigrar a cambio de achuras ya, él no la tiene debe conseguir que los que los sigan crean en su palabra y le den la oportunidad de mostrarse, él no puede mostrar gestión, él no puede mostrar que le dio trabajo a la gente, el tendrá que imponer que hay otra manera de crecer, el tendrá que contagiar la esperanza y la creencia que se puede hacer otra ciudad distinta, no es fácil, pero tampoco imposible.
Para colmo de males ahora han revertido la cuestión que el presidente o el gobernador son aportadores naturales de votos, por la teoría del derrame, hoy la militancia, la necesidad de creer que los votos se consiguen en cada ciudad han generado esa luz de esperanza que no vemos en el horizonte.
Eldisparadoruruguay.com.ar. – Juan Carlos Botta
