
Mariano Farías lo hizo posible, un encuentro en la redonda hoy convertida en un palacio que no dista a ser menor que la historia de Uruguay, muy destacado de la ciudad, fachadas, jardines, pileta, sala estar, lugares de comedores, hasta un gimnasio hay ahí tuvimos el privilegio de realizar la despedida de año, en un momento nuestro bolsillos temblaban hast el preciso momento que Mariano se convierte en Papa Noel y nos informa que no se debe absolutamente nada, cuando se sirvieron tres bandejas enormes de Pollo, Carne, Cordero, papas rellenas, ensaladas varias, verduras varias al horno varios manjares, fiel al momento, si bien el motivo era despedir el año el tema de fondo era agasajar, recordar y hacer un humilde mensaje al amigo Naldo después de haber bajado las persiana de su quincho por más de 50 años.

Mariano tiene estas cosas, vocación de servicio, tratar de que todos sus amigos se sumen, participaban la peña de los Mecánicos, la del Quincho.
Juan Carlos Bota -El Observador – Eldisparadoruruguay.com.ar.