El hambre no espera y castiga a los más pobres

Desde la Mesa contra el Hambre de C. del Uruguay ratificamos la urgencia de la aplicación de la Ley 11.140 de Emergencia Alimentaria de Entre Ríos

porque dos meses después de su sanción, el hambre sigue acuciando, los comedores y merenderos ven que la demanda aumenta a pasos agigantados y los alimentos no llegan.

Las organizaciones sociales e institucionales que conformamos esta Mesa entendemos la necesidad de generar estructuras eficaces para la distribución de alimentos y garantizar la transparencia en la provisión de comida. Sin embargo, mientras se dilata la efectiva puesta en marcha de la ley, el hambre no espera y castiga a los más pobres.

Sabemos que son tiempos complicados y que la solidaridad de la población también se ve limitada, compartiendo tal vez solo su propia escasez.

 Por eso se vuelve i prescindible que los niños, adultos y ancianos mayores que asisten a los comedores barriales, que retiran su vianda, que van a los merenderos, reciban del Estado, a través de las organizaciones, una respuesta concreta e inmediata.

Es imperioso que desde el Estado provincial se garantice la atención básica de la alimentación y la nutrición adecuada de la población en riesgo de subsistencia y se cree la Mesa de Diálogo Social en el ámbito del Ministerio de Desarrollo Humano, como órgano de participación y consulta.

En Concepción del Uruguay, las distintas organizaciones sociales, políticas, gremios, la Iglesia Católica a través de Cáritas, las Iglesias Evangélicas y las Universidades que conformamos esta Mesa tenemos la convicción de que solo a través de una red comunitaria fuerte lograremos afrontar la emergencia que hoy deteriora la vida de tantos entrerrianos.

 Aunando esfuerzos y coordinando acciones, esperamos que el Gobernador Rogelio Frigerio comprenda y actúe porque en Entre Ríos hay gente con hambre.

Mesa del Hambre

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