Es evidente que el peronismo entrerriano necesita un recambio generacional, con una convocatoria abierta, amplia y con todos y todas en la trinchera.
Se necesita “barajar y dar de nuevo”, reconociendo que los únicos responsables de la derrota somos los propios peronistas.
La soberbia y la omnipotencia de muchos dirigentes que se ocuparon de su bienestar personal, dando la espalda al pueblo fueron las causales, que motivaron que el peronismo apostó a un cambio.
Hoy llorar sobre la leche derramada no sirve y se necesita de la grandeza de todos, encolumnar los cuadros y salir desde la trinchera a reconquistar los pasos que se perdieron por la ambición de muchos y la cobardía de otros tantos.
Se debe reflotar la identidad desde la misma estructura pertidari, con el peronismo militando, dando lugar a quienes se sientan convencidos de salir a la lucha, en procura de reconquistar lo que nunca se debió abandonar, la mística partidaria y las tres banderas de Peron y Evita.
La codicia de muchos de los dirigentes actuales , que se repartieron los cargos para no perder vigencia y su status de poder, sumado a que no conforme ubicaron a sus familiares directos, despreciando a los cuadros dirigentes que son quienes están en el mostrador del peronismo, hicieron que el pueblo se cansará y aquel peronista de a pie, opte sin perder su verdadera identidad, con un voto castigo.
Las pruebas están a la vista. Bastiones provinciales como Concordia y Gualeguaychu quedarán en manos de autenticos desconocidos. La que se dijera capital del movimiento pero también capital de la pobreza, mereció el castigo menos pensado.Sembro vientos y recogió tempestades; mostró un pueblo empobrecido y cuadros peronistas dirigenciales amasando fortunas y cuestionados judicialmente.
Familias enquistadas en el poder que no tuvieron la grandeza que formar desde sus propias organizaciones cuadros que los hereden.Prefirieron seguir y seguir embuidos y borrachos de poder, sin dar lugar a las generaciones venideras.Asi no fue.
Si no se tomo esta lección y no se convoca a todas y todos, el peronismo tiende a desaparecer.
Se debe realizar la convocatoria más amplia que se pueda, abrir el congreso partidario, todos adentro y juntos.
Buscar nuevos cuadros y peronistas que tengan necesidad de ayudar al pueblo y de triunfar.
Caminar para sumar y con humildad saber reconocer los errores, y volver a empezar.
Si asimilamos la última lección que nos dio el pueblo con su voto, lograremos volver a ser lo que fuimos, caso contrario nos espera el bastón y la mochila del marical de la derrota.
Todo este paisaje casi extremo para la política peronista institucional local, en aras de recuperar el camino perdido, debe estar acompañado de otra; la gubernamental.En tal sentido celebramos que Lauritto se anime a estrechar filas y experiencias de gestión con Rosario Romero a los fines de amalgamar a dos comunas peronistas, casa una con su impronta y su idiosincrasia.
Lo que si advertimos que nuestro Pato Concepcionero parece y se muestra comp ” un lobo solitario”.
Deberá entender a esta altura de SU PARTIDO, que debe ir a todos esos encuentros con sus allegados de gestión; sumarlos a las tratativas programáticas y hacerlos hombres y mujeres de experiencias en lo político y en lo gubernamental, más allá de los vínculos de relaciones partidarias y de gestión.
El Observador – eldisparadoruruguay.com.ar