Primero, agradecerte que me tengas en cuenta.
Segundo, aclararte que no soy candidato a nada. Conozco y acepto mi lugar dentro del peronismo uruguayense. Como decía un gran dirigente, “sillas hay para todos, el problema que todos quieren la misma”. Ese no es mi caso, se donde estoy.
Por último, esa expresión “es de escritorio” como un déficit, es un concepto antiguo. Las categorizaciones son producto de una vieja concepción política donde, solo el que “se embarra las alpargatas” tiene una visión más clara de los problemas y sus soluciones.
Ese pensamiento nos trajo hasta acá, con dirigentes pocos formados, que miran lo chiquito y que menosprecian el estudio ajeno. Parecería que con esa discriminación encubren sus propias limitaciones.
Creo firmemente que nadie sobra, y que los liderazgos se practican convenciendo, no descalificando ni amenazando. Mucho menos excluyendo.
Abrazo.
