SI HAY MISERIA, QUE NO SE NOTE.

Nos hemos tomado el trabajo de realizar algunas consultas, obvio, en la mayor intimidad, ya que muchos de los que se animaron y se atrevieron lo hicieron con  absoluta reserva, por miedo a represalias.

Fueron varios nuestras fuentes y lo hicimos en distintas ” administraciones públicas, fundamentalmente respecto a recursos transferidos desde la provincia, como provisión de insumos y o elementos de primera necesidad y o urgencias.

Lo más preocupante fue saber que los hospitales ya no reciben ni las partidas y menos los medicamentos e insumos de cirugía. Cada director de hospital cabecera como el nuestro, J.J.de Urquiza, debe ” hacer maravillas” con la atención  de pacientes que ingresan de urgencias.

Este estado de situación no trasciende, como decíamos en virtud de no querer las personas responsables, comprometer su estabilidad laboral.

Imaginemos que si esto está aconteciendo en los hospitales públicos dependiendo de la provincia, ni pensar en otras administraciones que si bien cubren áreas importantes, ninguna puede ser más que un hospital o un centro de salud.

Frigerio se luce en el autódromo de Paraná, con cara de ” feliz cumpleaños” mientras comedores, centros de salud y hospitales que dependen y están bajo su responsabilidad, hacen ” malabares” para brindar una copa de leche o atender pacientes en estado crítico.

Aquellos entrerrianos que optaron por en cambio, hoy no se podrán quejar, ya que la miseria generada desde el gobierno provincial, no tiene límite. Gustavo Borde no fue un opulento gobernador y ha sido motivo de nuestras críticas, pero en sus ocho años de mandato no se sintió el malestar que hoy reina a lo largo y ancho de la provincia. Podemos hacerle a Bordet infinitas críticas desde lo político pero no desde lo más sagrado que la atención de la salud.

Renglón aparte viven los docentes, que pesa sobre ellos la educación a la que deben enfrentar con sueldos por debajo de la línea de pobreza, con escuelas y colegios carentes de los elementos que hacen a la educación.

Frigerio es PRO, nada que lo diferencie del LLA y es uno de los pocos que mantiene la identidad de Macri con un pie en estos momentos con los libertarios. Por herencia trae los genes de su padre ” desarrollista” gestión  Arturo Frondizi y el en persona ministro de Mauricio.

El horizonte provincial es crítico y pareciera nada le importe. Es de esperar que el peronismo entrerriano recapacite, logre el movimiento unido y aproveche esta situación para encontrar los mejores hombres y mujeres para la futura gestión. Lauritto es uno.

El Observador  – eldisparadoruruguay.com.ar

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