Yo no tengo que contar que clase de mujer, Es Marisa Arrieta  laburadora, humanamente increíble, amiguera  y  fundamentalmente en la 8 de Junio le ha puesto la cara a cada unos de los visitantes que pasaron por ahí,  mas de treinta mil

Lugar para Marisa Arrieta hay dentro de mi gabinete,  solo resta que ella quiera demostrar que el dolor tiende a disminuir y la encuentre bien a ella, en lo personal, es difícil buscar palabras apropiadas, dentro de tanto dolor y de momentos inimaginables.

Por que escribir sobre este tema, que es tan delicado, personal y humanamente el  ser humano que es Marisa  no se lo puede imaginar, que pasara por su cabeza, que momento transita su familia, el daño que causo, que situaciones  vive a diario, pero lejos de ofender a nadie y espero que sean comprendidas mis palabras, siempre busque una explicación a los distintos momentos que atraviesan los seres humanos.

Dias atrás me decían encima de tanto dolor, de tanta incompresion humana la dejaron afuera de su trabajo y no me quede con esta cuestión, fui en busca de comprender el por que, si era algo personal, si hubo una movida política, pero hubo una explicación coherente, que se podrá comprender o no pero aquí Marisa necesita reencontrase con ella, sufrir el dolor la coyuntura que crea conveniente con las herramientas que se tengan a Mano, el economico es un tema que apremia, mientras se observan a verdaderos haraganes de hacer usufructo de su trabajo contemplamos que otros por amor propio aceptan todas las deciciones.

No describo a los desaparecidos, estoy desnudando a todos mujeres, varones, jóvenes, niños que cuando la necesidad tiene cara de hereje siempre tenes que recurrir a otro pidiendo una mano.

No fueron situaciones linda vividas en la oficina de la 8 de junio y mas cuando sabían quien debía darte una mano,  te mandaban la gente a que la atiendan en otro lado, no nos olvidamos muchachos, muchachas solo a veces nos hacemos los desmemoriados.

Pero claro que vamos al frente, asi como hoy nos preguntamos públicamente no es el momento de apoyarla a Marisa independientemente de la situación que la traviese, no somos médicos, sicólogos, ni comprendemos las distintas enfermedades mentales a lo mejor estamos equivocado y Marisa necesita recuperar su eje para volver, a lo mejor falta este detalle.

Aqui hay que dejar de lado temas polticos, pase de factura, o cualquier otra interpretación alejada a la realidad actual a lo mejor se busco que recupere sus ganas y objetivos.

Juan Carlos Botta – eldisparadoruruguay.com.ar

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