
Mile Slobodiañiuk – A mí no me vengas con el cuento
de que los ex son maestros, de que vienen a enseñarnos algo, de que el dolor es aprendizaje, de que gracias a ti soy más fuerte. No. Yo a ti no te debo nada! No te debo nada: ni un suspiro de gratitud, ni un trago de mi vaso, ni un respiro de mi aire. No fuiste maestro, ni camino, ni una lección envuelta. No me iluminaste, no me hiciste fuerte, no me diste alas. Las heridas me las cerré sola, las lecciones las arranqué de mi propia piel, me