Es innegable que la ciudad por crecimiento vegetativo de su población, necesariamente se extiende y por ende necesita de espacios para construcción de nuevos barrios para viviendas y obvio surgen loteos y terrenos a la venta.
Tal como reza y norma la ordenanza de loteos, para comenzar con la venta de sus terrenos, se necesita un diagrama propio, con medidas autorizadas, con calles diagramadas para circulación y con el porcentaje que debe “donar ” al municipio, para futuras instalaciones de postas sanitarias, escuelas, comisarías, centros de salud, estación de bombeos, etc. etc, y todo lo que significa de bien común, máximo cuando un loteo se encuentra a distancias significativas del centro urbano.
Dicho esto, el municipio, organismo que supervisa , controla y autoriza los loteos, debe bregar que las normas se cumplan para evitar ulteriores inconvenientes con sus futuros propietarios.
O sea todo dueño del terreno que sea deberá someterse antes de poner a la venta los lotes, a cumplir con las especificaciones que regulan los mismos.
Sabrán ustedes que se trata de una actividad con fines de lucro, como cualquiera, que se obliga a ciertas regulaciones del catastro local.
No se puede engañar a los posibles compradores ofreciendo espacios carentes de todo servicio y que después el municipio, como jamón del medio, entre compradores y lote adores debe resolver los problemas que no fueron supervisados previo a la autorización del mismo.
Por estos días podemos ver varios loteos puestos a la venta, con nombre de la inmobiliaria que los negocia, pero escasamente vemos en la misma publicidad estática, que diga AUTORIZADO POR MINICIPALIDAD.
Detalle no menor que debería estar en todos y cada uno, para tranquilidad de sus interesados de no ser sometidos a engaño y asimismo que se sepa que ha cumplido con lo que rige para su puesta a la venta.
Sería aconsejable que los responsables del reordenamiento urbano formalicen una comisión de estudio y factibilidad, cada vez que ingreso “un loteo”, que no quede en la exclusividad del DEM sino que sea también supervisada por el HCD